David de Miguel está al frente de una explotación con 250 cabezas de Asturiana de los Valles y Asturiana de la Montaña desde hace dos años, fecha en la que se jubiló su padre. Continúa haciendo la trashumancia con su ganado, llevándolo a tres poblaciones orensanas en abril desde hace 15 años, regresando con las reses en diciembre a Boo donde cuenta con una nave construida en el año 2000 y varias cuadras.
-¿Cómo está el sector de la carne?
-Hay mucha competencia y los precios se mantienen, tenemos un contrato con Alimerka y vendemos entre 70 y 80 terneros anuales, pertenecemos a IGP Ternera Asturiana.
-¿Cómo ve el futuro?
-El futuro lo veo complicado según la política que se está llevando a cabo en cuanto al lobo y a la quema de pastos. Nuestro ganado está en pastos comunales, y cuando hay un incendio, ya sea provocado o no, nos acotan la zona de pastos por 2, 5 ó 10 años por la regeneración y si el ganado pasa a esos pastos, te sancionan con multas. El problema es que el ganado por mucho que quieras controlarlo, se puede escapar a la zona acotada. Toda la vida se quemó para limpiar y se metían las vacas y ahora no se permite. Por el tema de subvenciones comprometes a meter tu ganado por ejemplo en una zona del Puerto durante cinco años, si hay un incendio y lo acotan, o te quedas sin terreno o llevas el ganado corriendo el riesgo de que se pase para lo acotado y te multen.
-¿Cómo valora la feria del Mercaón?
-Este año se mantiene el ganado, siempre se vende mejor en la feria que en casa, tienes posibilidad de sacar mejor precio, hay más compradores. El ganado ya se empieza a vender el viernes por la tarde cuando el ganado entra en el recinto, hay que controlar que aunque se venda se mantenga en la feria, ya que hubo ganado que ya se marchó ayer, así acabamos con las ferias, habría que controlarlo.