La literatura de la madrileña Ana Rubio es pura nature writing, un género literario poco desarrollado en España pero con bastante prestigio y arraigo en otros países como Estados Unidos. Su máximo exponente fue Henry David Thoreau con Walden, una obra en la que el filósofo americano cuenta su día a día durante los más de dos años que estuvo viviendo solo en una cabaña junto a un lago en el corazón de un bosque. Se entiende como nature writing aquella forma de literatura de no ficción en la que abunda la descripción del medio y hay una fuerte implicación emocional del autor con el paisaje. ‘La Montaña se mueve’ es un canto a todo lo que rodea a la autora, paisaje y sentimientos. “El aislamiento y la búsqueda de respuestas personales forman el núcleo de esta historia, donde la naturaleza no solo es el escenario, sino también un personaje en sí mismo”. Ana nació en Madrid, pero llevaba 23 años viajando por el mundo hasta que llegó a Asturias, primero al Parque Natural de Redes, donde se desarrolla la historia, y luego al enclave de Bustapena, municipio de Villanueva de Oscos, donde actualmente reside.
La soledad. La naturaleza. Una cabaña. “Realmente era algo que tenía que vivir. Cuando deje el Pirineo Catalán era pensando que tenía que estar todavía más en contacto con la naturaleza y sola. Necesitaba estar sola. Estaba haciendo algo que realmente me pedía el corazón”, afirma. Y así fue, durante más de medio año Ana habitó un cabrerizo con la única compañía de su perro Río. Sin agua corriente y con la electricidad que le proporcionaba una pequeña placa solar, nació su libro, que redactó a la luz de las velas “sin darme cuenta”.
Durante su estancia, “de alguna manera necesita registrar, escribir una especie de diario. Al estar tan en silencio necesitaba escribir y que los pensamientos no se quedaran dentro de mi porque me volvería loca”. La energía “que me daba la pequeña placa solar la utilizaba para conectar mi portátil e impartir clases de escritura online y trabajos terapéuticos especialmente con mujeres”.
Ahora, ‘La montaña se Mueve’ “está ficcionado porque hay algunas partes que he tenido que idear para que tenga un sentido o hay detalles que he tenido que narrar para que se entienda”. Para poder publicar su obra, Ana ha lanzado una campaña de micromecenazgo (crowfunding) a través de la plataforma Verkami, en Internet. Le restan unos 15 días, hasta el 20 de noviembre, para conseguir el objetivo -3.500 euros-, a través de donaciones altruistas a partir de 10 euros y con diferentes recompensas a partir de 20 euros. El enlace que te transportará a su día a día, sorprendida por la belleza y la fuerza de la naturaleza, es https://vkm.is/enlibrar. Un enlace que nos revela “un pasado, unas heridas no curadas y muchas luchas emocionales. Estos elementos convierten el texto en una especie de confesión literaria que conecta profundamente con el lector, haciéndolo partícipe de ese proceso de sanación que la protagonista experimenta”. Ana solo se acercaba al pueblo más cercano, Soto de Lorio, concejo de Laviana, una vez al mes para hacer la compra. “Llegué a la cabaña en febrero -2021-, y todavía no tenía un huerto. Así que tenía que bajar a comprar al pueblo. Dejaba en coche a kilómetro y medio de la cabaña, porque no había carretera para acceder, y cargaba la compra a mano”.